La mayoría de las personas conocen las ventajas del yoga para el equilibrio entre la mente y el cuerpo, pero pocas han escuchado hablar de los beneficios del yoga facial. Importado de la sabiduría hindú y oriental, esta práctica desconocida hasta hace muy poco es en realidad una disciplina milenaria que promete fortalecer los músculos responsables de la mímica y devolverle al rostro su tersura natural. Descubre en qué consiste y cómo puedes implementarla en tu rutina de ejercicios.
¿Qué es el yoga facial?
El yoga facial es una disciplina que se vale de los estiramientos, masajes y ejercicios para activar y/o relajar los músculos del rostro. Básicamente, se trata de un tipo de entrenamiento para fortalecer y tonificar la anatomía facial. A diferencia de los clásicos masajes faciales, se centra en trabajar los puntos de energía del rostro para aliviar las tensiones, mejorar la microcirculación y promover un estado de ánimo positivo. ¿Cómo funciona?
Por una parte, el yoga facial actúa fortaleciendo los músculos de la cara y el cuello, lo que se traduce en un aumento del tono y la fuerza muscular como sucede con el entrenamiento de cualquier otra parte del cuerpo. Sin embargo, también activa el flujo sanguíneo del rostro, lo cual estimula el metabolismo celular y favorece la producción de colágeno y elastina, mejorando casi instantáneamente la apariencia de la piel.
Las ventajas de practicar yoga facial
Ya quieras tonificar tu rostro o devolverle su tersura natural, el yoga facial puede ayudarte. Incluir entre 15 y 30 minutos diarios de esta práctica en tu rutina de ejercicios mejora la apariencia de tu rostro al tiempo que puede reducir las arrugas y ralentizar el proceso de envejecimiento prematuro en tu piel, según una investigación. Además, es un entrenamiento excelente para devolverle al cutis su brillo natural ya que activa el metabolismo de la piel, favorece la oxigenación y nutrición celular y contribuye a la eliminación de toxinas.
Al mejorar la circulación sanguínea y linfática, también es un buen aliado para prevenir la acumulación de grasa en el rostro y la flacidez. Esto porque además, se ha encontrado que es una práctica muy efectiva para fortalecer y tonificar los músculos del cuello y el rostro. Practicar yoga facial con regularidad ayuda a definir el contorno de tu cara, fortalece las mejillas y mejora el tono de los labios. Esto sin contar que es un excelente ejercicio para relajar las tensiones, combatir el estrés y aliviar el cansancio.
¿Qué debes tener en cuenta al comenzar a practicar yoga facial?
El yoga facial es un entrenamiento apto para todos. Sin embargo, la elección del plan de ejercicios puede variar de una persona a otra dependiendo de su edad y objetivos a largo plazo. Por lo general, su práctica incluye una serie de ejercicios de estiramiento para activar poco a poco los músculos y luego, se enfoca en trabajar los grupos musculares específicos. Por ejemplo, si quieres tonificar la piel del contorno de ojos, los masajes en la zona serán el ejercicio de elección mientras que si pretendes tonificar las mejillas, podrías necesitar una combinación de masajes y ejercicios faciales.
Al igual que con la práctica de yoga en casa, se recomienda comenzar con un plan de entrenamiento suave y, a medida que vayas ganando habilidades, incorporar ejercicios más complicados que requieren una mayor destreza. De esta manera, tus músculos irán ganando tono poco a poco y evitarás el riesgo de que puedan aparecer molestias o tensiones en el rostro y cuello. En cualquier caso, no olvides terminar siempre tu rutina de yoga facial con algunos ejercicios de relajación para reducir el estrés en los músculos.
Vale aclarar que si has estado sometido a tratamientos con bótox, es probable que tus músculos faciales no respondan con la misma rapidez a los ejercicios de yoga facial. Esto se debe a que el bótox afecta la movilidad de los músculos, por lo que podrías necesitar más tiempo y esfuerzo antes de comenzar a notar los primeros resultados. De manera similar podría suceder si has sufrido una parálisis facial. En ambos casos, se recomienda no comenzar a practicar yoga facial sin antes consultar a tu médico.
¿Cómo incluir el yoga facial en tu rutina de ejercicios?
Recuperar la firmeza del rostro practicando yoga facial no requiere demasiado tiempo. Un estudio realizado en la Universidad de Northwestern encontró que seguir un programa de ejercicios faciales de 30 minutos diarios o en días alternos puede tonificar ligeramente los músculos del rostro y mejorar los rasgos faciales en solo 20 semanas. Obviamente, si tu objetivo consiste en mantener este efecto a largo plazo y ralentizar la aparición de los signos del envejecimiento prematuro, deberás incluir los ejercicios de yoga facial como parte de tu rutina.
Con la práctica de unos 10 o 15 minutos diarios de yoga facial, podrás mantener tus resultados en el tiempo. Sin embargo, ten en cuenta que estas recomendaciones pueden variar dependiendo de tu edad y condiciones físicas. Por eso, lo ideal es que apuestes por un programa de ejercicios personalizado enfocado a tus necesidades como los planes que te brindamos en Wowego. De esta manera, podrás practicar estos ejercicios de yoga en casa y crear una rutina adaptada a tu estilo y ritmo.